Te doy dos opciones que vuelven loco a cualquier amante del dulce: un red velvet y una cheesecake. Hoy no tienes que decidirte por una u otra. Dos sabores en uno, con lo que ello implica, que te guste sí o sí. Yo pongo la receta, tú, si eso, pones el amor y la amistad para el día que se acerca. O directamente caes rendido a los pies de esta combinación y le declaras amor eterno.