Un entrante. Un picoteo. Abrir el apetito. Conversar. Reunirnos en torno a la mesa. Todo esto y mucho más provocarán estos palitos de pan-pizza cuando el olor embriague a los presentes y el humeante aperitivo salga de tu horno.
Es una receta sencilla, rápida y con mucho sabor si además se acompaña de un aceite especiado con un toque picante y un poco de vinagre de módena, donde mojar estos palitos de pan-pizza.