Agradecida por tenerte aquí de nuevo, inauguremos un año de recetas, momentos, sabores. Para que además de las nuevas propuestas, fáciles y completas, lo verdaderamente importante sean las vivencias alrededor de la mesa, las reuniones de amigos, la familia armando alboroto y como recuerdo de esos momentos, sabores especiales que se fijan a fuego lento en la mente.  ¡Vamos allá!

Cuando vivíamos en Monterrey, solíamos ir a un sitio donde además de vender tacos, también vendían «papas asadas«. Con una de esas podía comer una familia entera, ¡parecían melones!. El caso es que eran patatas asadas mezcladas con crema, queso y aderezadas con bacon, carne a la barbacoa o cualquier otro invento que se le ocurriera al parrillero. Las acompañaban de tortillas de maíz secas, tipo tostadas, con las que ibas ayudándote para acabar con semejante porción.

Éstas que te traigo hoy son a menor tamaño y un poco más finas en presentación. Ideales para acompañar una carne a la plancha o como entrante.

En esta presentación, he aprovechado para rellenar cada dos mitades con dos sabores distintos, por aquello de «para gustos, los colores», más bien los sabores, aplicaría en este caso.

Ingredientes

• 2 patatas partidas longitudinalmente
• 4 cucharas de mantequilla
• 1 cucharita de sal
• 50 g. de bacon cocinado previamente
• 1 jalapeño en rodajas o en su defecto medio pimiento verde en rodajas
• 30 g. de peperoni o chorizo rojo
• 100 g. de queso filadelfia
• Una pizca de pimienta negra
• Queso rallado para gratinar

Si tienes recipiente especial para microondas, parte las patatas de forma longitudinal y mete a alta potencia durante 15-20 minutos. O puedes hervir las patatas enteras hasta que estén en el punto de cocción en el que al partirla no se te desmorone, porque entonces sólo servirán para hacer puré.

También puedes meterlas en el horno a 170º durante al menos una hora y una vez hechas, partirlas para proceder al rellenado de las mismas.

Una vez estén listas las patatas de cualquiera de las tres formas (microondas, hervidas o al horno), hay que sacarle su contenido con una cuchara de manera muy cuidadosa, dejando un borde alrededor de un par de cms. De esta manera, la patata tendrá estabilidad, como si fuera un cuenco.

Pon la patata en un bol y añade la mantequilla, que se derretirá con el calor de la patata. Añade sal y pimienta y el queso de untar hasta que esté totalmente integrado.

Si vas a hacer dos rellenos distintos, separa en dos recipientes.

Fríe el bacon junto con el jalapeño. Añade a la primera mitad de patata y queso y rellena las dos mitades.

Añade el peperoni o chorizo a la otra mitad. Rellena las otras dos mitades.

Corona con queso rallado y gratina en el horno durante 10 minutos o hasta que el queso esté fundido.

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